Por detrás del racismo y sexismo, el edadismo es una de las grandes formas de discriminación de nuestra sociedad.
Un concepto que se está escuchando mucho durante los últimos años…¿pero sabes que significa?
El edadismo es una forma de discriminación social hacia las personas mayores basada en prejuicios y estereotipos. Por lo general asociamos mayor con anciano y anciano con enfermo y deterioro. Además de estos estereotipos, podemos observar actitudes edadistas en el uso del lenguaje cotidiano. Solemos usar palabras como “los abuelos”, “los jubilados” o “los viejos” para referirnos a las personas mayores.
Mantener actitudes y creencias edadistas en nuestra sociedad trae consigo consecuencias tanto físicas como mentales para las personas mayores. Por ejemplo, aquellas personas mayores que se sienten una carga para sus familiares suelen presentar más episodios de depresión y conductas de aislamiento social. Además, aumenta en ellos una percepción negativa de su propio envejecimiento haciendo que les sea más difícil enfrentarse a las barreras vitales.
Es un aspecto que discrimina claramente a las personas mayores. La presencia de barreras, como escaleras empinadas o ausencia de transporte público en lugares donde es complicado caminar.
En ocasiones, a la hora de encontrar trabajo, la edad se ve como un inconveniente en vez de como una virtud. Lo que provoca que, personas mayores que quieren trabajar y tiene la capacidad de hacerlo bien, les sea difícil salir del paro.
Vemos la vejez como un equivalente a la ignorancia y, en ocasiones, tratamos a las personas mayores como si fuesen niños que estuviesen aprendiendo cómo funciona el mundo.
Estos son algunos ejemplos de frases hechas que en ocasiones, de manera inconsciente, utilizamos en el día a día, sin caer en la cuenta del daño que podemos ocasionar.
Paradójicamente, cada vez hay más muestras de edadismo en una sociedad destinada a envejecer y por ello debemos combatir este tipo de discriminación. El primer paso para combatir el edadismo empieza por nosotros mismos. Debemos ponernos en el lugar de la persona mayor y vernos a nosotros mismos en su misma situación. Seguramente no nos gustaría ver cómo, a pesar de nuestra experiencia y vivencias a lo largo de la vida, somos discriminados por personas más jóvenes sólo por el mero hecho de ser mayor.
Desde Rodríguez de Andoin V estamos totalmente en contra de este tipo de discriminación, y estamos convencidos que si entre todos trabajamos para evitarla podremos romper esa barrera llena de prejuicios y estereotipos que no son ciertos.
Por este motivo, si el artículo os ha resultado de interés, compartirlo entre vuestros familiares y amigos, y así daremos a conocer y combatiremos el edadismo poco a poco. Gracias.